Cuando se consume con moderación, la cerveza puede traer varias ventajas para la salud y aquí enumeramos algunos ejemplos:

Puede reducir el riesgo de cáncer

Entre los derivados del lúpulo, ingrediente que otorga su aroma y sabor amargo a la cerveza, se encuentran compuestos que inhiben y pueden prevenir la aparición de algunas células cancerosas, de acuerdo a un estudio de la Facultad de Química de la Universidad de Washington.

Refuerza el sistema inmunológico

La cerveza tiene la capacidad de mejorar el sistema inmunológico de las personas, evitando que éstas se contagien de enfermedades infecciosas, tales como el resfrío o el herpes. O al menos, en algunos casos, evita que los síntomas sean tan graves o duraderos. Un remedio casero antiguo de la zona de Alemania es beber cerveza caliente cuando se tiene un resfriado, porque descongestiona la nariz y mejora la circulación sanguínea.

Evita el estreñimiento

En el caso de la cerveza, que está hecha de cebada, cubre la mayoría de los requerimientos diarios de fibra soluble, siendo la mejor bebida (luego del agua) para nutrirnos.

Mejora la salud cardiovascular

Debido al lúpulo, la cerveza tiene efectos anti inflamatorios, aumentando significativamente los niveles de colesterol “bueno” y ayudando a combatir ciertas enfermedades cardíacas.

Pero la moderación es la clave, ya que en exceso perjudica nuestra salud, aumenta la presión arterial y es un factor de riesgo para las enfermedades cardiacas y el daño al hígado.