Durante eventos masivos como los festivales de música, la cerveza es una de las bebidas que más se consumen, desgraciadamente, los contenedores en donde se vende, ocasionan un alto grado de contaminación después de su uso. En el caso del Festival Vive Latino, que se lleva a cabo en la Ciudad de México, el número de toneladas de basura que se generan sólo de estos contenedores excede los dos mil kilos, lo que tiene un impacto muy grande en el medio ambiente.

Con el fin de evitar que esta impactante cantidad de basura impacte el medio ambiente, Karen López Mota, la jefa de abastecimiento de Cuauhtémoc-Moctezuma Heineken México, anunció que se sustituirán los vasos de plástico, por vasos hechos con cascarilla de cebada residual del proceso de producción de cerveza.

La iniciativa nació de la empresa a nivel global, quienes convocaron a que creativos de todas partes del mundo, participarán proponiendo un proyecto de sustentabilidad. De los 65 proyectos que participaron, se seleccionaron tres ideas, mismas que se presentaron en Ámsterdam, el hogar de Heineken, para potencializarlas.

Uno de esos proyectos fue el de los vasos de restos de cebada, mismos que utilizarán la merma de la producción de la cerveza para su creación, lo que los convertirá en una parte importante del proceso de la cerveza.   Esto ayudará a evitar que los dos mil kilos de plástico que generalmente produce el festival, se reduzcan exponencialmente.